Fotos: Picapino |
Menos mal que todo va quedando lindísimo, aunque nunca quedará como las fotos de cuartos que veo por internet porque entre nosotros, la verdad es que los cuartos de niños tan remonos me ponen los pelos un poco de punta. Primero, porque estoy de las guirnaldas de banderitas hasta.... y sobre todo porque pienso que nuestra hija, tan mona y simpática ella, debe ser la prima hermana de destroyer sin nosotros saberlo porque su cuarto, pese a no tener nada, todos los días acaba del revés.
Así que mientras la bañamos y le hacemos la cena, uno de nosotros se las apaña para entrar en dicha zona franca con el fin de recoger en cuestión de milisegundos todo el despliegue efectuado, momento en el cual uno no piensa si el conejito rosa queda bien con el elefante de patchwork en la misma balda y te importa ya un pimiento morrón que los juguetes de plástico feos parezca que invaden todo eclipsando a los ecológicos y preciosos que te han costado una fortuna. Porque mientras combates con con las piezas de puzzle rescatadas de sitios remotos, tu nariz te dice que se te quema el pescado y Javi te avisa que ya ha sacado del agua a nuestra bellísima sirena con más hambre que Carpanta. ¿Cómo mantener en estos casos un standard decorativo?
Y cuando tenga la cama en el cuarto, habrá que celebrarlo, ¿no? Y entonces tendré que comprarme esto que la gente de Castillos en el aire ha tenido hoy la poca decencia de enseñarnos y encima a un precio que acepta hasta mi VISA. No te digo...
De verdad que alucino con vosotros....
ResponderEliminarJajaja... ¡espero que para bien!
EliminarManuela se va a divertir mogollón con nuestra familia de craneo cuadriculado.
ResponderEliminar¡Seguro que sí! Y así de una vez deja en paz las Matrioskas de la abuela que las tiene...
EliminarOs queda una cama guapísima!!! qué contenta estará Manuela con ella y la familia cuadradín!!! besos.
ResponderEliminarA ver qué tal le sienta el cambio de cama. Yo creo que le va a gustar, ¡o eso espero!
EliminarUn abrazo