Un banco verde mint para la entrada. Pasen ustedes

Fotos: Jimema Roquero

Que me digo yo a mi misma: ¿qué estará haciendo mi Dori en Israel? Y venga a mandar fotos a través del Facebook posando aquí y allá como una modeli, que si ahora en la playa de Tel-Aviv que si ahora ni os digo dónde. En fin, que yo no sé vosotros pero desde este punto del mapa vallecano, Israel parece un mundo fascinante al que definitivamente quiero ir. Como a cualquier punto del mapa, pero este más en estos momentos de puritica envidia que me da. Y mientras me suspiro y me nostalgio echándola de menos aunque sea a través de internet, me acuerdo del maravilloso mueble que le hicimos cuando todavía no eramos ni la sombra de lo que somos. Ella decidió confiar en nosotros pese a que no teníamos nada que prometerle ni un pasado que nos avalase y el resultado fue este.

Un banco en DM lacado en verde con un baúl bajo el asiento. Esto es lo que puedo contaros. Lo que guarde ahí es cosa suya y esos misterios los tendrá que desvelar ella misma, si vuelve y no le da por quedarse a vivir allí ahora que es cosmopolita y sabe hacer maletas. Vivir para ver.